En los últimos tiempos estamos viendo cómo bares y restaurantes “de toda la vida” echan el cierre. En grandes y pequeñas ciudades, ocurre. ¿Qué pasa realmente para que un negocio que funcionaba, cierre? La explicación pasa por la “no reconversión” del restaurante. No reconversión y también que a veces no existe una continuidad. Descubramos las claves para conseguir hacer una readaptación a los tiempos actuales de un restaurante de toda la vida… Y que triunfe igual o más que antes.
Un restaurante que lleva tiempo, años, incluso décadas funcionando, conoce la clave de su éxito y lo hace, aparentemente bien, pero, ¿se está adaptando al cambio? ¿Sabe que estamos en el siglo XXI y casi en el año 2020? Porque por muy bien que funcione habría que mirar si está estancado y eso es el primer paso para la decadencia.
Un restaurante de siempre necesita actualizarse, necesita revivir, tiene que saber qué debe cambiar – cómo y cuándo hacerlo. Un restaurante de siempre tendrá que pasar por un cambio de manos y eso hará que los cimientos se tambaleen, según y cómo se lleve.
¿Qué conocemos por un restaurante de toda la vida? Ese que lleva ahí pues eso, toda la vida. Ese restaurante que todos conocemos, que es de los antiguos, que gusta e incluso, que encanta. Todo de él habla de lo de “toda la vida”: su carta, su decoración, su personal… Y eso, está bien en determinadas dosis pero hay que ir adaptándose y avanzando.
Ese restaurante que a pesar del paso del tiempo, continúa estable y trabajando a pleno rendimiento… ¿hasta ahora? Eso es lo que hay que ver y evitar que caiga en el fracaso.
Un restaurante de toda la vida se va a ver frente a esta situación en más de una ocasión, todo dependerá de cuánto tiempo permanezca abierto. Un restaurante de toda la vida que lleva mucho tiempo trabajando tiene que, en algún momento, vivir cambio de manos de dirección y si es familiar, cambio generacional. ¿Cómo afecta esto a un negocio?
Depende. Si se lleva bien y con inteligencia y creatividad empresarial, representará una oportunidad. Si por el contrario se lleva desde el ego y desde el miedo, el fracaso está asegurado.
¿Cuántas empresas familiares que llevan años de éxito fracasan en poco tiempo porque no han conseguido realizar un cambio generacional apropiado para su negocio? Muchísimas. Y esto en los restaurantes ocurre y muy a menudo. Y es que no sabemos soltar, no sabemos pasar las riendas y no sabemos cuándo es el momento para irnos de donde estamos y dejar paso a los que vienen pisando fuerte y sabiendo más (no porque sepan más en sí del negocio sino porque están más actualizados).
El cambio de dirección en un restaurante de toda la vida a menudo es una gran oportunidad para abarcar otros cambios que el restaurante necesita pero para los que no se veía el momento oportuno.
Un cambio generacional es un buen momento para reconvertir ese restaurante de toda la vida en algo más actual, salvaguardando el concepto de siempre que es la clave de su éxito y de la fidelización de sus clientes pero adaptado al hoy y aportando algo nuevo – extra – novedoso.
Hay que saber llevar un cambio de dirección en un restaurante y no es tarea fácil.
Cuidado, antes de continuar, con las reconversiones de restaurantes de toda la vida. Estamos hablando en este post que pueden y seguro que así será, una oportunidad para el negocio, para avanzar, para cambiar pero hay que saber hacerlo con inteligencia, con seguridad y sin “cargarnos” el camino que han hecho nuestros antecesores hasta el momento.
Hay que tener en cuenta, muy en cuenta en las reconversiones de restaurantes, que no se debe dejar atrás a los clientes de siempre. Hay que contar con ellos y pensar que un cambio drástico es empezar de cero.
Por todas estas razones, el primer paso para una reconversión de un restaurante es analizar bien los siguientes puntos:
Cuando tengas esta línea temporal marcada con sus puntos clave bien determinados, es el momento de decidir y tomar acción.
Un restaurante puede y a veces debe sufrir una reconversión. Seguramente, si la decisión está tomada sobre puntos sólidos, sea un gran paso hacia delante. Eso sí, en la reconversión de un restaurante no sólo se incluyen los aspectos físicos como local – carta, etc. También hay que tener en cuenta los online que hoy en día, son imprescindibles. Si reconviertes tu negocio, tu página web y tu app deberán estar “a la par”. No los olvides ni los dejes de lado y para cualquier ayuda, en Klikin estamos especializados en ello.